Tenforde M, Dawood F, Ellington S et al. Communicating the Value of Influenza Vaccines to Patients: Translating Vaccine Effectiveness to Acceptance. Ann Intern Med 2023; Epub 28 November 2023. doi:10.7326/M23-2802
https://www.acpjournals.org/action/showCitFormats?doi=10.7326%2FM23-2802&area=0000000000000001
Los autores, miembros de la división de gripe de los CDC de los Estados Unidos, desarrollan aspectos de la comunicación del valor de la vacunación antigripal en el adulto utilizando los datos de efectividad de la vacuna. Entre 2010 y 2020 estiman que anualmente la gripe infecta al 10% de la población del país y que cada año1 de cada 1000 adultos de 65 o más años son ingresados por gripe. Aunque la efectividad promedio oscila entre el 40% y el 60% frente a las consultas ambulatorias pudiera considerarse como modesta por parte de algunos profesionales, un porcentaje similar frente a hospitalizaciones, enfermedad crítica y fallecimientos podría resultar más convincente. Es más, poniendo en contexto las estimaciones de efectividad a escala poblacional muestran como los casos evitados de esos parámetros clínicos pueden, aun con una vacuna imperfecta, suponer unos beneficios muy significativos. Por ejemplo, la vacunación antigripal se estima que ha evitado en la temporada 2019-2020 en el país unos 7 millones de casos, 3.4 millones de visitas médicas, 100.000 hospitalizaciones y 7.100 muertes. Comentan la herramienta SHARE desarrollada por el Centro para que los profesionales la puedan incorporar como información clave para lograr una potente recomendación para la vacunación. El acrónimo SHARE quiere decir: (Share) comparte el por qué una vacuna antigripal es lo más correcto para el paciente, (Highlight) enfatiza las experiencias positivas con las vacunas antigripales, (Address) aborda las preguntas y preocupaciones que tenga el paciente, (Remind) recuérdales que las vacunas ayudan a protegerles y a sus seres queridos, y (Explain) explícales el coste potencial de padecer la gripe. Concluyen que, hasta no disponer de vacunas de nueva generación, las actuales, aunque imperfectas, continúan jugando un papel clave en evitar enfermedad y muerte.