McLean K, Goldin S, Nannei C, Sparrow E, Torelli G. Vaccine 2016;34:5410-5413
En 2006 se constituyó el Global Action Plan for Influenza Vaccines al objeto de aumentar la capacidad mundial de producción de vacuna antigripal para poder abordar la preocupación de los países en vías de desarrollo en caso de una pandemia de gripe. En 2014 se remitió una encuesta a 44 fabricantes de vacuna para evaluar su capacidad de producción tanto de vacunas estacionales como pandémicas. En 2006 la capacidad mundial era de 500 y 1.500 millones de dosis de vacunas estacionales y pandémicas, respectivamente. Desde entonces ha venido aumentado de manera que en 2013 la capacidad era de 1.500 y 6.200 millones de dosis, respectivamente. No obstante desde 2013 ha disminuido la capacidad para la estacional para llegar en 2015 a 1.467 millones. A pesar de ello, la faceta positiva es que se han registrado cambios positivos en cuanto a una mayor producción, a pequeña escala, por parte de las industrias del sudeste asiático y del Pacífico occidental. Curiosamente la producción de vacuna pandémica ha aumentado de 6.200 millones en 2013 a 6.400 en 2015. Los motivos detrás de este fenómeno residen en el desplazamiento a la fabricación de vacuna tetravalente, lo que permite que se fabriquen más dosis de vacuna monovalente en el contexto de las infraestructuras existentes de producción de vacuna estacional, y a un mayor uso de vacunas adyuvadas lo que permite un ahorro antigénico (sparing). Los autores creen que en los próximos cinco años la producción va a modificarse significativamente por los cultivos celulares no dependientes de huevos embrionados y especialmente por la utilización de vacunas recombinadas en células de insectos. Concluyen que para mantener y extender la actual capacidad de producción es esencial que aumente la demanda de vacuna estacional.