Los pediatras se mantienen inflexibles en su posición respecto a todo lo que tiene que ver con el colectivo antivacunas. De hecho, consideran que “autoridades sanitarias y colegios profesionales deben mantener una actitud contundente y exigir responsabilidades a los profesionales sanitarios que, en contra de toda la evidencia científica actualmente disponible, difunden y avalan teorías en contra de la vacunación”. De hecho, consideran que “estas actitudes deben ser consideradas como mala praxis y como tal deben ser perseguidas”. Concretamente, lo que recaman los pediatras es que la historia clínica de los pacientes menores refleje aquellos casos en los que sus padres o tutores rechazan la administración de vacunas, dejando constancia de este rechazo y “que se produce a pesar de haber recibido formal y explícitamente información clara y completa sobre beneficios y riesgos de la vacuna y asumiendo su responsabilidad derivada de su decisión”. Esta fórmula también se podría articular invitando a los padres a la firma de un documento escrito en el que conste su rechazo.
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Autor: Asociación Española de Vacunología
Asociación científica dedicada a la formación e información sobre vacunas destinada a profesionales sanitarios y público en general.