En la revista The British Medical Journal un artículo pone de manifiesto cómo algunos expertos hacen una llamada a los vacunados frente a la COVID-19 para que continúen adoptando las precauciones necesarias para minimizar la transmisión del SARS-CoV-2 ya que en algunos países se está observando un incremento de las infecciones a los pocos días tras recibir la vacuna y antes de que haya hecho efecto, debido probablemente a bajar la guardia por una falsa sensación de seguridad. Este hecho se ha observado en los ingleses mayores de 70 años y en población de Israel. Así, en una encuesta llevada a cabo en Inglaterra se ha comprobado que los mayores de 80 años que habían recibido la primera dosis en las tres semanas previas, el 41% dijo que ya se había reunido con personas ajenas a su domicilio.
Los expertos instan a las autoridades a que elaboren mensajes en los que se exprese claramente que los vacunados no disponen de protección inmediatamente después del pinchazo y que ésta no se alcanza hasta pasada unas semanas tras la primera dosis.