Un estudio publicado en JAMA ha concluido que la vacuna frente al herpes zoster, Zostavax, parece ser segura en pacientes con enfermedades autoinmunes del tipo de artritis reumatoidea, artritis psoriásica, espondilitis anquilopoyética y enfermedad inflamatoria intestinal tratados con inmunomoduladores.
Los autores plantearon un estudio retrospectivo con más de 463.000 beneficiarios de Medicare y encontraron que la vacuna no se asoció con mayores tasas de zoster postvacunales. Además la vacuna se asoció con un 39% menor de riesgo de enfermedad a partir de los 42 días tras la vacunación. Piensan que es conveniente plantear un ensayo clínico para demostrar la seguridad y eficacia en pacientes con este tipo de enfermedades y en tratamiento.