La nicotina que entra en el organismo se encarga de crear adicción, porque da placer. Pero acabar con la nicotina, y en consecuencia con la adicción al tabaco, con solo una inyección puede ser una realidad en el futuro inmediato. Es lo que han creado científicos del Weill Cornell Medical College de Nueva York (EE UU): una terapia génica, que administrada como vacuna, proporcionaría una protección permanente contra la nicotina y las ganas de fumar. De momento, lo han logrado en ratones. Esta misma técnica ya se ha usado para tumores y enfermedades de los ojos. Ahora, los científicos van a probar la vacuna en ratas y en primates no humanos, para a continuación hacerlo en humanos.
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Autor: Asociación Española de Vacunología
Asociación científica dedicada a la formación e información sobre vacunas destinada a profesionales sanitarios y público en general.