Según un artículo publicado en la revista American Journal of Infection Control, la vacuna antigripal podría, por mor de la inmunidad entrenada (trained immunity), reducir no solo el número de casos de COVID-19 en vacunados sino también la necesidad, en caso de infección, de precisar hospitalización, ventilación mecánica, acortando también los días de estancia hospitalaria. A estos resultados llegaron en un estudio retrospectivo de cohortes llevado a cabo en el estado de Michigan con 27.201 pacientes con COVID-19 confirmada por el laboratorio.
Los autores, tras exponer las posibles limitaciones de su estudio, enfatizan en la importancia de promover el uso de las vacunas antigripales para reducir la carga e impacto generado por la COVID-19.